Desde hace ya unos años, cuando se empezó a hablar de la posibilidad de instalar nuevas industrias en la Avda Francisco Montenegro, la Mesa de la Ría dijo que todo era una engaño para dilatar la actividad contaminante y retrasar la recuperación de la Ría de Tod@s.
Fertinagro desembarcó como la gran salvadora de la industria en Huelva, con una inversión de 9 millones de euros para crear 80 puestos de trabajo, y buscar una solución a los trabajadores de Foret y Nilefos, con quienes han estado jugando todo este tiempo.
La Junta de Andalucía, a través de su polémica Consejería de Empleo, le entrega a Fertinagro una subvención de 250.000 euros para realización de cursos de formación para los trabajadores de Foret y Nilefos, con idea de prepararlos para la nueva actividad de la factoría de la compañía Tervalis (propietaria de Fertinagro).
Rápidamente, y de forma muy sorprendente, el Ayuntamiento da licencia a Fertinagro, aliándose con la Junta de Andalucía, alargando la agonía de esta ciudad.
A pesar de ello, la Mesa de la Ría siempre defendió que todo era un engaño, una engaño para la ciudad y para los trabajadores, y todo sufragado con dinero público, de todos, y que algunos insisten en que puede utilizarlo en intereses propios.
Esta jugada de la Junta, Ayuntamiento y Fertinagro tenía un único objetivo, no dejar sola a la industria química más contaminante y peligrosa que se encuentra en la Avenida Francisco Montenegro. Ya que con el cierre de Nilefos y Foret, con un posible final de actividad para Fertiberia, Atlantic Copper se vería sola ante la presión de la ciudadanía por la recuperación de la nuestra Ría.
Por eso, desde la Mesa de la Ría, ahora más que nunca, queremos pedir a la ciudadanía que es el momento de continuar en la lucha, que no podemos desfallecer, que nunca ha estado tan cerca el sueño de la gran mayoría de los onubenses, una verdadera recuperación de la Avenida Francisco Montenegro.
Esa recuperación de un entorno que pertenece a la ciudad y que fue arrebatado durante el Franquismo, además de ser uno de los principales objetivos de la Mesa de la Ría, sería un motor que generaría mucho más empleo que el que actualmente conservan las industrias químicas allí instaladas, sería un cambio de modelo económico para esta ciudad, sería una mejora en la calidad del aire que respiramos, sería el principio de una Ría limpia.
Hoy la Punta del Sebo está un poco más cerca de Huelva.