La Coordinadora Verde apoya la propuesta de la Asociación Mesa de la Ría para una verdadera regeneración de la marisma, y califica de «chapuza» la propuesta de cubrir los fosfoyesos con una capa de tierra.
La regeneración integral de la ría de Huelva significaría una oportunidad para la creación de empleos verdes, que Andalucía no puede despreciar.
De ser una mera receptora de residuos peligrosos procedentes de distintas comunidades autónoma y varios países europeos, la regeneración integral de las marismas onubenses situaría a la comunidad andaluza en la punta de lanza de los nuevos empleos del siglo XXI, guiados por la innovación, el conocimiento y la búsqueda de la sostenibilidad.
La Coordinadora Verde pide por tanto a la ministra de Medio Ambiente, Rosa Aguilar, que actúe para sacar los 21,6 millones de metros cúbicos de fosfoyesos depositados a lo largo de tantos años en la ría de Huelva por la actividad de Fertiberia así como los materiales contaminados con cesio-137 con actividad radiactiva media.
«Tenemos una propuesta para crear empleo: limpiar las marismas de Huelva de fosfoyesos. Es la forma de hacer bien las cosas y crear sinergias positivas. Considerar como regeneración ambiental las actuaciones de restauración paisajística propuestas por Tragsatec sería una farsa», ha declarado Florent Marcellessi coportavoz de la CV.
Añade Florent Marcellessi que “Desde la CV apoyamos la propuesta presentada por la Asociación Mesa de la Ría, que sí contempla actuaciones para la regeneración y recuperación integral de la zona de la ría de Huelva, afectada no sólo por los vertidos de fosfoyesos sino también por el depósito de materiales contaminados con cesio-137. En este sentido, exigimos igualmente la catalogación y retirada de la zona de todos aquellos materiales con actividad radiactiva, y su confinamiento en una instalación adecuada que deberá determinar ENRESA”
Las propuestas de la asociación ciudadana onubense, que reciben ahora el apoyo expreso de la Coordinadora Verde, son básicamente:
Retirada de los fosfoyesos que sobrepasen la altura de la concesión otorgada, tres metros, a cargo de la empresa Fertiberia en cumplimiento de la sentencia de la Audiencia Nacional, que la obliga a retirar todo lo que ha vertido fuera de la concesión en altura o mediante subarriendo. Serían trasladados en ferrocarril a corta minera preparada para tal fin.
Con el mismo destino y medio de transporte, retirada de los fosfoyesos hasta tres metros de altura a cargo de la Administración, con ayuda de fondos europeos.
Catalogación y traslado de los residuos vertidos ilícitamente por EGMASA, distintos de los fosfoyesos, a depósitos adecuados. Las 5.198 TM de residuos contaminados con Cesio 137 que quedan por retirar y gestionar deben trasladarse a una instalación adecuada, a cargo del Consejo de Seguridad Nuclear, EGMASA y ENRESA.
Sonia Ortiga, coportavoz de la plataforma verde, destaca que “difícilmente se podría entender que para solucionar una chapuza, se recurra a otra. El Ministerio de Medio Ambiente está obligado a contemplar que el simple enterramiento de los fosfoyesos conlleva riesgos ambientales como los que puecan causar la erosión, las filtraciones, la subida del nivel de mar o pequeños terremotos, además del riesgo de dejar en la marisma de Mendaña material radiactivo.
¿Se va a permitir un nuevo Palomares en Huelva?, ¿habrá que estar durante cuarenta y tantos años realizando un seguimiento a la ría con mediciones radiactivas y exigiendo la retirada del cesio-137?”
